28nov19:3021:00Divas, transgresoras e intoxicadas (El Desvelo)con Sofía Barrón (online), Olga Agüero y Javier Fernández Rubio.

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28 de noviembre de 2025 19:30 - 21:00

Detalle

Luisa Casati, Carmen Tórtola Valencia y Teresa Wilms Montt fueron mujeres transgresoras reacias a comulgar con las normas burguesas establecidas; las tres hicieron suyos términos novedosos a finales del siglo XIX como anarquismo, abulia, spleen, ocultismo o hiperestesia. Su belleza fue captada por retratistas europeos e hispanoamericanos al igual que su manera de entender el arte fue recogida en textos redactados por los principales literatos del momento.
Luisa Casati (1881-1957), Tórtola Valencia (1882-1955) y Teresa Wilms Montt (1893-1921) compartieron devoción por los efectos de sustancias tóxicas. Ellas encarnaron el ideal de mujer cosmopolita y elegante, a caballo entre la respetabilidad y el vértigo por el placer desconocido, una dualidad en parte marcada por el uso constante de psicotrópicos y la exhibición sin tapujos de su libertad sexual. Las tres, completamente distintas en sus vidas, quedaron unidas por la transgresión y por la mezcla de fascinación y repudio que cosecharon a su paso.
La extravagante marquesa Luisa Casati —mujer de fácil identificación por el pelo rojo, los ojos ennegrecidos con kohl, el rostro blanco y el barroquismo de un vestuario inspirado en los Ballets rusos— fue la heredera de la mayor fortuna italiana de principios de siglo XX. El esmero que empleó en cultivar una imagen ambigua, entre culta y frívola, llevó a recorrer a la marquesa el amplio abanico de afecciones finiseculares; entre ellas las drogas se dibujan como el triunfo de lo artificial sobre lo natural.Pulcra y extravagante, la figura de Tórtola Valencia posee el encanto de lo dual: la bailarina fue adicta a la morfina, poseyó múltiples amantes para disfrazar su latente homosexualidad y se convirtió en asidua de tugurios de mala fama. Teresa Wilms Montt, poeta y narradora chilena, fue conocida en los ambientes intelectuales españoles como Teresa de la Cruz. Arte, belleza, independencia, libertad y rebeldía fueron pilares básicos en la escritora. Vivió el desarraigo y al margen de la sociedad. Fue una «verdadera bohemia».

Sobre la autora: Sofía Barrón es doctora en Historia del Arte por la Universitat de València. Actualmente ejerce como Profesora Doctora Acreditada en la Universidad Internacional de Valencia (VIU), donde también coordina el Grado en Educación Primaria. Además, ejerce como directora artística del Museo de Arte Contemporáneo Vicente Aguilera Cerni de Vilafamés (MACVAC). Su labor investigadora está centrada en la pintura española del entresiglos XIX-XX y del siglo XX, con especial atención a la construcción visual en torno a las drogas y al análisis de la producción artística de mujeres. A este respecto ha publicado en revistas académicas de alto impacto como Arte, Individuo y Sociedad, Asparkía y Espacio, Tiempo y Forma. Serie VII. Historia del Arte. Entre sus contribuciones destacan capítulos de libro como «Fantasías opiómanas. La imagen de la mujer en la
estampa orientalista decimonónica» (Ulises Ediciones Expandidas, 2025), «El esnobismo perverso. La imagen pictórica y literaria de la adicta burguesa a finales del siglo XIX y principios del XX» (Dykinson, 2022) y «Picasso y Cornuty. La absenta como adicción cambiosecular europea» (Universidad de Colonia, 2015). Es autora, asimismo, del volumen ¡Pisa morena! Cuplé, copla y baile en época de Joaquín Sorolla (Generalitat Valenciana, 2013). Su trayectoria incluye el comisariado de exposiciones y la participación como ponente en diversos congresos nacionales e internacionales sobre arte y literatura.