20,00€
Autor: CASTAÑAR PÉREZ; JESÚS
Editorial: VIRUS
Publicado en: 2014
ISBN: 978-84-92559-48-0
“Las discusiones entre la izquierda revolucionaria sobre la legitimidad del uso de la violencia y sobre la eficacia de las estrategias noviolentas atraviesan toda la historia del movimiento obrero y de los movimientos sociales.
En el Estado español esa discusión se vio renovada y potenciada con la irrupción de un potente movimiento antimilitarista y la campaña de insumisión, en los años ochenta y noventa.
La capacidad de movilización, así como la creatividad y originalidad de sus acciones ayudaron a renovar por completo las herramientas de acción y agitación de los movimientos sociales, y su legado sigue estando muy presente en las movilizaciones del 15M, las diferentes campañas por la sanidad y la educación públicas, y, especialmente, en las acciones de la PAH.
A pesar de las discusiones que sigue provocando la noviolencia entre sus partidarios y detractores, pocos conocen el intrincado camino que han seguido las ideas de la noviolencia, y las diferentes corrientes de las que ha bebido y que se han ido fraguando a partir de las experiencias históricas y las discusiones teóricas de múltiples protagonistas.
Detrás del concepto de noviolencia se esconde una riquísima tradición teórica, que abarca desde corrientes que la entienden como un todo (corriente holista), sobre la base de concepciones filosóficas y/o religiosas, hasta corrientes que la entienden como una praxis integral político-social, de carácter revolucionario, de influencia principalmente anarquista, pasando por aquellas que apuestan por razones meramente pragmáticas por la acción noviolenta para el cambio político.
El presente libro nos hace partícipes de las discusiones y discrepancias existentes entre las corrientes defensoras de la noviolencia, a la hora de definir qué se entiende por acción noviolenta y cuáles son sus límites (el sabotaje o destrucción de bienes, la presión psicológica o la coacción, la violencia a nivel simbólico…), y nos presenta la noviolencia como una herramienta eficaz de la que se han apropiado numerosos movimientos políticos a lo largo de la historia, sin declararse noviolentos y sin renunciar a otras formas de lucha.”