Una comunidad, como una casa, puede pasar por diferentes etapas; de pequeño deterioro, de falta de atenciones y estancamiento, de inclusión de nuevos elementos y de muchos proyectos de mejora futuros. Todas ellas han sido parte de la historia de casi 4 años de La Vorágine.
No se ha dejado de trabajar por el mantenimiento de este espacio, por dotarlo de actividad, procesos maravillosos e ilusionantes (muchos exitosos, algunos fallidos), pero hemos fallado en la comunicación a toda esa comunidad que apoya en lo anímico, los económico o lo utópico. Somos conscientes y por eso se agradece que a la asamblea del pasado 25 de enero acudiera tanta gente con voluntad de conocer, de aportar, se seguir siendo parte de este tejido.
Vamos a seguir buscando manos y almas que nos “soporten” para que en el año del cuarto aniversario aumente la poesía, la protesta, la propuesta y para que esta casa siga siendo de todxs, para todxs y con todxs.
Os dejamos la presentación en vídeo y en power point ( Asamblea Voraz) para que no olvidéis que tenemos un gran pasado pero, sobre todo, un prometedor futuro.