¿Has encontrado tu Caja Negra? ¿Aquella que esconde las pulsiones más recónditas de tu ritmo? Nosotros sí… te invitamos a gozarte la selección de libros de la editorial argentina Caja Negra (que tras 7 años en la pelea han sido elegidos editores del año en Argentina en este 2014) dedicados a desentrañar lo que subyace sobre lo que parece evidente en el mundo de la música.
Fíjate que arrebato poderoso…
CULTURAS // 22 €
Jacksonismo
Muñecos, zombies, colosos, cyborgs, objetos fetiche y personajes de fantasía como Peter Pan o Mickey Mouse, que obsesionaron por completo a Michael Jackson, habitan estos ensayos no solo como testimonio del encantamiento y la hechicería con la que impregnó toda su obra, o como presagio de los desastres personales que erosionaron su carrera, sino ante todo como jeroglíficos en cuya superficie se refleja la trama que conecta a Jackson con la expansión del mundo neoliberal, globalizado y hipermediatizado en el que vivimos hoy. Ese proceso, que comenzó en la década del ochenta y que implicó la mercantilización de todos los aspectos de la vida, encontró en el Rey del Pop –la mercancía más absoluta y universal– a su mayor promulgador. Su cuerpo –cuerpo postracial, posthumano y andrógino– encarnó la voluntad de dominación planetaria del capital, su capacidad implacable de abstraerlo todo y al mismo tiempo investirlo con una fuerza libidinal irresistible. Tan irresistible como las performances con las que Jackson nos encandiló a lo largo de nuestras vidas, y frente a las cuales los autores de este libro se rinden una y otra vez como si se tratara de un fascinante, perturbador y completamente inasible misterio.
El libro incluye también una serie de fotografías que apuntalan los aspectos más bizarros e iconográficos de Michael Jackson.
CULTURAS // 22 €
Black Music
LeRoy James
“La mayoría de los críticos de jazz han sido hasta ahora americanos blancos, mientras que los músicos más importantes no”. Con esta frase comienza la compilación que el lector tiene en sus manos, en la que se documenta uno de los ejercicios de crítica musical más radicales y salvajes que alguna vez se haya puesto en práctica. En estos ensayos, reseñas, entrevistas, notas para discos, crónicas e impresiones personales publicados entre 1959 y 1967, Amiri Baraka retrata la floreciente escena del free jazz, un movimiento que implicó una profundización de las innovaciones sonoras del bebop y la recuperación del jazz como expresión autentica de la cultura afroamericana en un momento en el que su éxito comercial lo había vuelto un género estandarizado y digerible para la América blanca.
Figura central y aglutinante del movimiento beatnik en los años 50 y del Black Power en décadas posteriores, Amiri Baraka hace uso de un lenguaje eléctrico y furioso que refleja la libertad de improvisación del free jazz para dejar en claro que esta música solo puede ser comprendida como parte de un cuerpo de experiencias que a lo largo del siglo XX dieron forma a una nueva conciencia sobre lo que significaba ser negro en los Estados Unidos. Y que por ello sus intérpretes, entre quienes destaca a John Coltrane (“su música es una de las razones por las que el suicidio parece una cosa tan aburrida”), Ornette Coleman, Archie Shepp, Sun Ra, Thelonious Monk, Albert Ayler, Pharoah Sanders, Sonny Rollins, Don Cherry, Wayne Shorter y Cecil Taylor, deben ser considerados, además de grandes músicos, como “intelectuales o místicos, o ambas cosas”.
CULTURAS // 35 €
Postpunk
Simon Reynolds
Si bien existen cientos de libros que documentan aquellos años en los que el punk desafió al status quo de la música con su nihilismo de tres acordes y la ética do it yourself, Postpunk. Romper todo y volver empezar de nuevo es el primero en recuperar a aquellas bandas que supieron ver en las condiciones generadas por el punk la oportunidad para establecer una verdadera ruptura con la tradición y experimentar por fuera de los estrechos parámetros del rock. Entregados a la tarea de profundizar la revolución iniciada por el punk, grupos como PiL, Joy Division, The Fall, The Slits, Devo, The Residents, Throbbing Gristle o Liquid Liquid exploraron territorios previamente desconocidos al incorporar las técnicas de producción del dub y la música disco, las radicales estrategias compositivas del krautrock, la música contemporánea y el free jazz, y el groove y la economía sonora del funk. Pero no solo de música se alimentó el postpunk: Cabaret Voltaire tomó prestado su nombre de Dada; Pere Ubu adoptó el suyo de Alfred Jarry; Gang of Four, inspirado por Brecht y Godard, trató de deconstruir el rock; los letristas absorbieron la ciencia ficción radical de J.G. Ballard, Philip K. Dick y William S. Burroughs; y bandas como The Pop Group o Contortions se inspiraron en el teatro de la crueldad de Artaud para romper las barreras entre el público y el escenario. Al purismo estridente del punk, el postpunk le opuso eclecticismo e hibridez. Y a su tradicionalismo rockero, un imperativo de cambio constante.
CULTURAS // 25 €
Resonancia Siniestra
David Toop
Sobre la escucha siempre ha pesado un estigma: el de ser, de entre todos nuestros sentidos, el menos fiable. Mientras que aquello que vemos y tocamos se nos revela como una realidad “objetiva”, una certeza a partir de la cual establecemos nuestro lugar en el mundo, el sonido se parece más a un fantasma; su lugar en el espacio es ambiguo y su existencia en el tiempo, transitoria. Es por ello que el sonido ha actuado desde siempre como metáfora de la revelación mística, los deseos prohibidos, lo siniestro, lo informe, lo sobrenatural y lo desconocido.
Así como en Modos de ver John Berger establece el lugar preponderante de la mirada en nuestra experiencia del mundo, en Resonancia siniestra David Toop se propone reflexionar acerca de la naturaleza del sonido y de la escucha, asumiendo como punto de partida su carácter espectral e inaprensible. A partir de estas reflexiones –organizadas de manera musical, con ideas que vuelven una y otra vez como notas recurrentes–, Toop da los primeros pasos para trazar una historia de la escucha, basándose en el testimonio que de ella nos brindan los mitos, la literatura, la pintura y la escultura. Además, al descubrir un mundo sonoro al interior de la obra de escritores como Melville, Hoffmann, Poe, Joyce, Woolf, Faulkner o Beckett, y de artistas como Rembrandt, Vermeer, Duchamp, Rauschenberg, Munch, Malévich o Twombly, Resonancia siniestra nos abre las puertas de una nueva dimensión perceptiva.
CULTURAS // 20 €
Después del rock
Simon Reynolds
Desde las columnas de Melody Maker, The Wire, Spin, Rolling Stone, y en cada uno de sus libros publicados, Simon Reynolds se propuso deconstruir el discurso del pop sometiéndolo a una disección ideológica que sin embargo no le ha impedido abandonarse a sus placeres. Su mayor logro deconstructivo es haber eludido las dos grandes metodologías analíticas de la crítica de rock -el “lirocentrismo” y la interpretación sociológica- para focalizarse en la materialidad sonora y considerar las políticas del sonido implicadas en las distintas estrategias compositivas del pop.
La suspensión del lenguaje en el noise, las regresiones oceánico-místicas del acid-rock, la preponderancia de la tríada timbre/textura/cromatismo por sobre la melodía y el mensaje en el post-rock y la música electrónica conforman un continuum psicodélico que recorre la historia del pop y que manifiesta la fascinación de Reynolds por las cualidades extáticas de la música, su potencia alucinatoria de disolución del ego y de las estructuras de poder que se alojan en la mente. Junto con estos aspectos sonoros y de manera complementaria, cuestiones como el fascismo de la imagen en Madonna, el dog fight y la esquizofrenia paranoica del hip hop, la atracción del postpunk por la cultura negra, los modos de sociabilidad implicados en la cultura rave y la función de la interfase tecnología-droga en el desarrollo de la música permiten a Reynolds indagar en la economía política del pop y las políticas de clase, raza y género que esconde.
En su primera traducción al español, los textos seleccionados en este volumen recorren las principales líneas de reflexión del crítico de rock de habla inglesa más importante de los últimos veinte años y sus inquietudes actuales respecto del futuro de la música, en un contexto en el que las posibilidades de las nuevas tecnologías ha transformado sus patrones de producción, circulación y recepción para siempre.