Los calendarios tienen una ventaja: nos permiten hacer cortes, establecer parteaguas, momentos rituales en los que hacemos balance y nos recargamos de razones y emociones para seguir empujando nuestros anhelos camino de las utopías que no nos han usurpado.
A pocos días de que acabe 2014, según el calendario gregoriano, en La Vorágine miramos hacia delante desde el pasado. Es lo que los indígenas andinos traducen explicándonos que vivimos de frente al pasado (nayra pacha) y de espaldas al futuro (jutiri pacha). Sabemos lo que hemos sido, pero ignoramos lo que podemos ser. Nosotras caminamos en el sendero azaroso de la utopía real del cambio social, de la justicia, del pensamiento crítico y todo lo que tenemos para seguir dando pasos es lo que ya somos, lo que hemos provocado, lo que hemos tejido.
Sabemos, por ejemplo, que en 2014 La Vorágine vibró con vosotros. Sólo en las 183 actividades programadas en este año (15 al mes, como media), han compartido tiempo, espacio, pensamiento y emociones 4.642 personas. El acumulado de este año y 8 meses que el proceso lleva en marcha es mayor, claro: 7.510 personas en 282 acciones y eventos.
Las cifras no pueden reflejar lo que hemos vivido, las dudas que hemos soltado al viento común, las ideas y acciones que se han construido. Es difícil olvidar las citas más activistas con colectivos como Brigadas Internacionales de Paz, Cantabria por el Sáhara, Masticable, LIBRES, Andarivel, la Plataforma Vasca de Solidaridad con Chiapas o el Comité de Solidaridad con los Pueblos-Interpueblos de Cantabria, la Asamblea Constituyente de Catalunya, Oxfam o Médicos Sin Fronteras, entre otros. Tampoco los encuentros poderosos con Juan Mari Zulaika, Juanma Murua, Ana Etchenique, Jaime Pastor, José Manuel Martín Medem, Enma Gascó y Martín Cuneo, Javier Fernández Rubio, Miguel Amorós, Juanma Agulles, Pablo Lopiz o Bru Laín… Pusimos nombre propio a la poesía de la conciencia crítica y la invocamos en la Surada Poética… regalo de palabra en la voz de Uberto Stabile, Subhro Bandopadhyay, Ferran Aisa, David Castillo, Ibon Zubiela, Idoia Carramiñana, Antonio Rigo y Biel Vila, o Inma Luna y Miguel Martínez López… Otras poetas han pasado por La Vorágine, desde Mariano Calvo Haya a Charo de Gorostiaga, de Enrique Ibáñez a Raquel Serdio, otras voces remezcladas en el micro abierto que van construyendo una voz tan común como la que propone Antonio Orihuela en el texto que ha regalado a La Vorágine y que se ha convertido en el primer título de la colección Textos (in) Surgentes.
También ha sido este un año de mucha música, de algo de teatro, de documentales y de consolidar espacios continuos de reflexión y aprendizaje, como los Sábados Feministas, Mirada Crítica u Otras Formas de Habitar… igual que no hemos desfallecido en la labor de tejer memoria colectiva con ciclos como Cine para Desmemoriados. Y como abonamos el recuerdo no podemos olvidar la magnífica fiesta de primer aniversario de La Vorágine que compartimos contigo y con 180 personas más en el genial espacio del Café de las Artes, o el libro DIGNA GENTE, el esfuerzo colectivo por (re) contarnos.
Ha sido tanto lo acontecido que se quedan muchos nombres y propuestas en la memoria no nombrada. Reuniones de trabajo, talleres de literatura con Pilar Salamanca o de herramientas digitales con Emmanuel Jimeno, encuentros de militantes, militancias del encuentro conjugadas en el sueño del común.
Las que no han podido asistir en persona se ha aprovechado de las tecnologías que han permitido que 1.020 personas pudieran ver en directo los 126 eventos transmitidos a través de la plataforma de Bambuser y que otras 6.320 lo hayan visualizado en diferido, como 1.628 veces se han visto los vídeos subidos a nuestro canal de Youtube.
Siembra y abono
Trabajamos, como decíamos, pensando en cómo construir el futuro desde este presente-pasado en el que nos (re) construimos. Para ello, este segundo año de La Vorágine está siendo reconfortante. Ya somos nueve las personas que, de forma voluntaria, sostenemos las tareas de mantenimiento y gestión del espacio. Carmen, Ángel, Varo, Emmanuel, Marta, Carolina, Pilar, Agustín y Paco se han comprometido con esta labor que sería imposible sin el apoyo de las personas Amigas y Aliadas de La Vorágine. Por eso, hemos vuelto a relanzar la campaña de inscripción. La lógica es la siguiente: casi todas tenemos 5 o 10 euros al mes con los que podemos elegir apoyar la consolidación de un proceso como este que huye de las dinámicas comerciales para instalarse en la cultura crítica no condicionada por vaivenes económicos sino empujada por la fuerza de una comunidad.
Es la comunidad la que abona esta siembra que no cesa, somos todas las que podemos cambiar nuestra ciudad desde pequeños huertos de ideas que subviertan el orden indolente de nuestros tiempos.
Con esa energía, ya tenemos muchos proyectos para el próximo año. Te podemos adelantar que estamos trabajando con intensidad en lo que ya llamamos La Escuelita de (Des) Aprendizaje Político o en ciclos como la Palabra Rota (sobre las rupturas del lenguaje)… pero eso… eso es la historia que viene y aún estamos de espaldas a ella…