14,00€
Autor: AMPARO MGM
Editorial: EL LOKAL
Publicado en: 2021
ISBN: 978-84-122618-0-6
“En un mundo donde las imágenes acaparan el interés por las palabras, nuestra identificación con el lenguaje, por lo tanto, cambia de perspectiva y, quizá también, de forma. El lenguaje como antes hemos entendido, sea por medio de palabras escritas o dichas, se ha desviado hacia otro estado de complejidad, donde resulta complicado analizar las medidas pertinentes para entender, cómo nos relacionamos actualmente. De la misma manera que cada vez más muros se erigen ante individues, el lenguaje que procesamos también reproduce una obtusa espiritualidad truncada, donde personas se entienden cada vez menos y cada vez más, nos distanciamos entre nosotres. No me parece absurdo decir que, las relaciones que construimos son cada vez más complejas, y tampoco me parece descabellado relacionar este fenómeno, con la forma en que utilizamos el lenguaje actualmente. Es incuestionable que el lenguaje, es una herramienta vital para generar vínculos entre personas, y es incuestionable que a parte de las palabras, gestos y símbolos, yace también una serie de lenguajes que perduran en las sombras.La sombra, en cambio, no produce relaciones ni genera situaciones, sino que las oculta. Todo lo que ocurre en las sombras permanece, en teoría, camuflado por una condición abstracta que impide su visibilidad.
Detrás de la música, de las ideas políticas que permean nuestras cabezas, de las actividades que generamos o del ímpetu que nos hace explorar nuevos espacios para generar nuevas maneras de hacer, siempre quitamos o le damos visibilidad a lo que nos parece más o menos importante. Este libro va un poco de eso, de conjugar la voluntad trascendente de hacer ver la intimidad de un ajetreo escondido, que muchas veces se nos pasa desapercibido porque tenemos nuestra mirada enfocada hacia otro lado.
El lenguaje, tal vez, es el misterio que nos ha sido legado a través del cual todavía es posible atisbar otros mundos que normalmente reposan escondidos por detrás del alma de una persona, si es que aún nos queda una. En las sombras, encon-tramos un puñado de informaciones que reanudan objetos y acciones bajo una luz ciega que nos niega la visibilidad. Para hacerse ver, es necesario que alguien nos cuente su historia; quizá así, abriremos nuestros ojos, no para decir cómo se deben hacer las cosas, sino para reconocer cómo las hacemos.”