Hay algo de fiesta en este miércoles extraño. El Ministerio de Educación Cultura y Deportes y la Confederación Española de Gremios y Asociaciones de Libreros ha reconocido a Traficantes de Sueños como la librería cultural 2015 y lo hace porque ‘Trafis’ agita la cultura. Hoy algo de fiesta porque un mundo opaco y cerrado reconoce la labor de quiénes llevan dos décadas sembrando rebelión y agitando libros que, de no ser espacios pioneros como Traficantes de Sueños, dormirían en los anaqueles de almacenes inhóspitos.
Hoy, todos los espacios hermanos de Traficantes nos sentimos felices y animados… el premio es de ‘Trafis’, pero lo sentimos como gasolina para este incendio de cultura crítica que todas construimos desde territorios diversos. La Pantera Rosa de Zaragoza, La Libre de Santander, Katakrak en Iruña, Cambalache en Oviedo, La invisible de Málaga, La Repartidora de Valencia, Synusia de Tarrasa, La Vorágine…. todas aprendiendo, todas caminando como librerías diferentes pero, ante todo, diferenciadas de ese mundo comercial en el que los libros son tratados como tornillos y donde el saber se cuenta en euros o en súper ventas.
La intensa actividad de Traficantes de Sueños en su nueva sede de Duque de Alba es envidiable: la autoformación de su pionero proceso de Nociones Comunes, las presentaciones, los debates… Traficantes es un contenedor de sueños y una palanca de generación de ciudadanía emancipada.
Felicidades compas, a todo el colectivo. Sabemos que os dejáis el alma en ese compromiso. Os mandamos un abrazo de norte con sabor a surada.
