* Inauguración de la exposición del fotógrafo asturiano este miércoles 20 de enero a las 19:30 en La Vorágine
Jugar con las palabras, jugar con la vida, jugar con las imágenes… lo que hace César Casona es jugar con la realidad y plantearnos los oxímoron de la vida en formato fotográfico. Un oxímoron es una “figura retórica” que une términos contradictorios entre sí y el fotógrafo asturiano César Casona fuerza esas contradicciones en entornos sorprendentes, manipulando artefactos y miradas como quien construye frases imposibles.
La exposición “Oxymoron, la contradicción” se inaugura en La Vorágine este miércoles 20 de enero a las 19:30 con la presencia del autor y con una invitación a limpiar la mirada y dejarse sorprender. Casona manipula pero sin manipular porque en ninguna imagen se ha llevado a cabo la utilización de retoque digital alguno.
César Casona es natural de Luarca, aunque desde hace tres años es profesor de primaria en el colegio Benedicto Ruiz de Ajo y conoce bien Cantabria gracias a las cuitas que acarrea lo de ser profesor en busca de plaza. A sus 34 años, explica Casona que entiende “que sólo encontraremos la verdad en la duda, en la contradicción. En el oxímoron”. Por eso, insiste: “Desde esta perspectiva, la fotografía ha sido para mi el medio más sencillo y preciso para expresar y exteriorizar esta reflexión, a través de la manipulación de objetos de la vida cotidiana”.
Oxymoron es una invitación a la incertidumbre, a dudar de lo evidente, a instalarse en las contradicciones en las que habitamos o en las que podríamos habitar. El trabajo “contradictorio” de Casona ha sido expuesto en Oviedo y en Navia y su paso por La Vorágine abre un 2016 lleno de citas.